Este primer y sencillo principio, que integra los otros cinco y que también puede practicarse como uno solo, conecta directamente con la esencia de nuestra existencia: el ahora.
Solo por hoy, solo por este momento… a partir de ahí nuestra práctica se vuelve renovada a cada instante, sin arrastrar ningún lastre del pasado ni enfocada en un proyecto ilusorio del futuro. Aquello que hemos de hacer, que hemos de vivir se encuentra aquí, en este momento, y enfocarnos ahí es realmente la base de nuestra práctica: la tierra sembrada que dará frutos por sí sola.
“Vive este momento, haz lo que tengas que hacer solo por hoy, sin buscar nada más que lo que encuentras en este instante: tú mismo, aquí y ahora.”
Fuente: Manual Nivel I Reiki Usui Tibetano.