Este es un tema que trataré de abordar de la forma más cuidadosa posible, porque es una situación algo dolorosa de afrontar, pero a veces necesaria.
Lo mas seguro de la vida es que algún día moriremos, sin embargo no siempre es de la forma mas esperada.
Muchas son las enfermedades que (por diversos motivos), hacen llegar al paciente a etapa terminal y quienes tienen un ser querido en estas condiciones, suelen buscar hacer de todo para tratar de ayudarle a sobrevivir (la esperanza es lo ultimo que se debe perder). Sin embargo cuando Dios (independientemente del Dios a quien profeses) decide algo, debemos aceptar con resignación este designio.
Por este mismo hecho de que estamos en una situación que nos mantienen en una tensión emocional, solemos buscar sanadores, gurús y hacemos lo que sea necesario; a veces cayendo en manos de gente inescrupulosa que se aprovecha de esto, para sacar el mayor provecho económico posible, generando una mala reputación a los sanadores / terapeutas.
Sin embargo el Reiki puede ser de gran ayuda para estas personas, pero no a nivel de causarles una sanación de la enfermedad física que ya se encuentra bastante avanzada.
Muchos sintomas o situaciones pueden presentarse en un paciente terminal, estando relacionados a su «pronta partida» o puede estar también relacionado a temas del pasado, llamados “asuntos pendientes”. Una de las grandes virtudes del Reiki es la integridad en la atención de estos temas, permitiéndose aligerar la carga de la maleta, para que cuando Dios indique, pueda marchar lo más tranquilo/a posible.
Reiki sirve en estos casos para ayudar al paciente a reequilibrándo energéticamente, disminuir la ansiedad, disminuir el dolor físico, disminuye el estrés y le ayuda a entrar en ese estado de paz consigo mismo.
Si tienes una petición de Reiki, por favor haz clic aquí
Cuatro Consciencias 